Fanfic: Secuestro Encantador [ Mark Tuan Y Tu] Capitulo 12

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Fanfic: Secuestro Encantador [ Mark Tuan Y Tu] Capitulo 12

Autora  Natalia Tavera Capítulo 12 Primera muerte ½ Juro que mi cabeza en ese momento estaba punzando de una manera […]

Fanfic: Secuestro Encantador [ Mark Tuan Y Tu], prologo

Autora  Natalia Tavera

Capítulo 12 Primera muerte ½

Juro que mi cabeza en ese momento estaba punzando de una manera increíble.

Me encontraba en una habitación completamente desconocida para mi, olía un poco mal, bastante humedad entraba en ese pequeño cuarto y no tenía ventanas.

Podía escuchar a dos diferentes voces dentro del cuarto.

Abrí los ojos lentamente y los cerré bastante rápido, la luz calaba y calaba como un maldito cerillo en el globo ocular.

Mis manos y pies estaban atados, traté de moverme un poco pero mis muñecas estaban apunto de sangrar. Tal vez cuando dormía estaba luchando por sacarme estas cuerdas de encima.

-¡Vaya! Has despertado – Otra vez esa maldita voz

-¿Dónde esta?- Fue lo primero que salió de mi boca

-¿Mark?-rió – Querida, no deberías preocuparte por ese idiota, ¿crees que te ama de verdad?- se acercó a mi

-Me ama y yo lo amo a él – traté de safarme

-Estas muy equivocada, no te ama-

Bam Bam estaba comenzando a hartarme, ¿Por qué carajo se la pasaba diciendo lo mismo?

-¿Dónde esta Aiden?- recordé al chico de ojos grises

-¿Aiden? – se dio media vuelta -Esta justo allí – señaló con su dedo índice

En efecto, allí se encontraba Aiden, estaba atado una columna de semento, sus ojos estaban cerrados y al parecer lo habían golpeado.

-¿Qué le hiciste idiota?- solté con rabia

-Solo tenía que aprender una lección – sonrió con satisfacción

Aiden estaba bastante golpeado, tenía en el rostro pequeñas marcas rojas que empezaban a tomar un color morado, una pequeña abertura en su labio inferior y aún seguía saliendo sangre de su nariz.

Volteé a ver a Bam Bam, su mirada era un poco más llena de odio hacia nosotros, bueno al menos eso quería, creer.

Los pasos afuera se volvían a hacer presentes, dudaba de que alguien aún estuviera con vida en este lugar frío y bastante espeluznante.

Rogaba al cielo por que fuera Mark, quería saber si estaba bien y si este maldito enfermo no le había hecho daño como lo había hecho ya con Aiden.

La perilla de la puerta estaba comenzando a girar, podía jurar que vería a Mark cruzar la puerta, pero no fue así.

-Hermano- era la hermana menor de Bam Bam

-Justo a tiempo hermanita, la diversión apenas comienza – Bam Bam lanzó una mirada bastante aterradora

Me basto unos cuantos minutos para saber en donde nos encontramos, la mesa detrás de Bam Bam, la pintura del pequeño cuarto y por supuesto, los mechones de cabello colgados en la pared como si fuese un trofeo de este hombre enfermo.

-¿Con quién terminaremos primero hermano?- la voz de esa chica era bastante estresante -Mark, Aiden o con esta chica débil –

Miré a Bam Bam rápidamente, no quería que la vida de dos maravillosas personas terminará, pero tampoco quería que la mía estuviera en juego, tal vez tenia que ser un poco egoísta, pero esa chica tenía razón, soy débil, no tendría la fuerza suficiente para enfrentarlos.

Mi cabeza era un completo desastre, pude sentir como estaba haciendo que mi cerebro se hinchara más, mi sien comenzaba a sentir toda esa presión horrible, las ganas de vomitar eran bastante fuertes, sin embargo no podía hacerlo ahora, estaba en todo un dilema.

-Vamos ____, ¿no eres capaz de escoger lo que quieres?, ¿Aún necesitas a tu patética familia?- la chica de cabellera negra estaba muy cerca de mi-¿No te has dado cuenta que no eres nadie? –

Mi furia estaba creciendo cada vez más y no solo por que estaba humillandome en ese momento, si no por ser tan cobarde y querer lastimar a otras personas que aprecio demasiado.

-¡CONTESTA! -su puño estaba estrellado en mi mejilla derecha

Volteé a mi lado izquierdo, allí estaba Aiden, herido y probablemente tenia hemorragias internas.

Mark se encontraba de mi lado derecho, no lo había visto antes, pero había sangre saliendo de su frente.

Y esa fue la gota que derramó el vaso, mis muñecas estaban a punto de sangre pero ese no iba a ser impedimento para matar a estos dos malditos enfermos

Continuara…

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